Ahora que tienes tu propia casa, te recomendamos la posibilidad de contratar seguro de hogar que te haga sentir tranquilo y gozar de las libertades que conlleva ser el propietario. También debes asumir ciertas responsabilidades para garantizar el cuidado de tu propiedad, tanto a nivel de limpieza como a nivel de mantenimiento. En ese sentido, el suelo es una de las partes más afectadas de la casa pues, por su naturaleza, está expuesto a pisadas de todo tipo a cualquier hora del día, restos de comida que caen cuando cocinamos, polvo que se acumula cuando dejamos la ventana abierta o cuando pasan varios días entre limpieza y limpieza.
Para evitar estar limpiando continuamente podemos adoptar ciertas medidas de prevención y contención, como andar descalzo por casa, pedir a tus invitados y acompañantes que hagan lo mismo y tener calzado adecuado y limpio en el recibidor para facilitarles el trámite. Asimismo podemos instalar un burlete en las puertas de acceso para detener el polvo que entra por las rendijas. De esta manera podrás reducir la cantidad de veces que es necesario limpiar tu casa.