Siendo un capital que invertimos a medio-largo plazo, los planes de pensiones tienen algunas limitaciones para disponer del dinero ahorrado.
Para rescatar el dinero invertido en un plan, tanto como pago único o como rentas periódicas, tienen que darse algunas condiciones: jubilación, discapacidad, dependencia severa o gran dependencia, e incluso fallecimiento. Igualmente, es cierto que existen otros casos excepcionales en los que podemos recuperar el dinero invertido, tales como una situación de desempleo, una enfermedad grave o el embargo de la vivienda habitual, ya que este tipo de acontecimientos extraordinarios influyen negativamente en la renta.
Es importante evaluar de manera adecuada cómo haremos el rescate. Lo mejor es priorizar el abono en rentas periódicas, frente al rescate único en forma de capital. Esto nos permitirá optimizar la factura fiscal.
En resumen, los planes de pensiones privados son productos de ahorro a medio y largo plazo, que cuentan con distintos perfiles de inversión, lo que nos permite escoger el que mejor se adapta a nuestra situación personal. Lo recomendable es confiar en la valoración que el agente financiero podrá hacer de nuestro caso, en función de nuestra expectativa de rentabilidad y de nuestro grado de aversión al riesgo.
No dudes en contactar con nuestros asesores si quieres saber cómo se calcula la pensión de jubilación y qué planes de pensiones responden a tu perfil de inversor. Ser previsores a la hora de hacer frente a nuestro futuro es siempre la mejor elección.