El transporte de carga en moto está regulado por la Dirección General de Tráfico (DGT), que establece normativas específicas para garantizar la seguridad tanto del conductor como del resto de usuarios de la vía. En términos generales, las motos tienen un límite claro en cuanto a lo que pueden transportar.
La carga no debe obstaculizar la visibilidad del conductor ni alterar el equilibrio de la moto, y debe estar debidamente sujeta para evitar que se desplace durante el trayecto. Además, las motos deben cumplir con las normas de circulación, que prohíben el transporte de objetos que sobresalgan de manera excesiva o peligrosa.
En cuanto a la seguridad vial, la carga debe estar siempre correctamente amarrada, y no puede sobresalir en dimensiones que puedan suponer un peligro para la estabilidad de la moto o para el resto de vehículos en la vía. Cualquier irregularidad o incumplimiento de estas normas podría acarrear sanciones, además de incrementar el riesgo de accidentes.
En todos los casos, y para estar completamente cubierto, es recomendable contar con un seguro de moto adecuado que te proteja en caso de accidente. Y ten en cuenta que, en función de tu vehículo, puedes tener diferentes necesidades. No es lo mismo asegurar una moto de 125 c.c. que una de 250 c.c.