¿Puedo tener un seguro de hogar sin cédula de habitabilidad?

Tener una cédula de habitabilidad no solo es obligatorio, sino también beneficioso, ya que garantiza la seguridad, el buen estado de la vivienda y aumenta su valor.

Esta cédula es un documento legal que confirma que la vivienda cumple con todos los requisitos mínimos para ser habitada y la expiden las autoridades locales tras una inspección del inmueble.

Además de ser un requisito legal, es importante por razones prácticas. Por ejemplo, si no tienes este certificado, algunas comunidades autónomas pueden multarte.

Por otro lado, es esencial que tengas este papel cuando desees vender tu vivienda, ya que los posibles compradores pueden solicitarlo. Y es que este documento ofrece garantías de que la casa cumple las normas exigidas por la ley. Por lo tanto, asegúrate de que tu cédula de habitabilidad está actualizada.

Asimismo, ten presente que este documento no se expide una sola vez, sino que debe renovarse periódicamente.

Si estás pensando en contratar una póliza de seguro de hogar, es imprescindible tener una cédula de habitabilidad válida.

Este documento sirve como prueba de que la vivienda es habitable y cumple las normas de seguridad necesarias. Sin embargo, si tu casa no tiene este papel, aún puedes intentar hablar con las compañías de seguros y ver si te cubren en función de otros factores, como:

●     El estado del inmueble.

●     Las medidas de seguridad existentes.

Pero, ten presente que este no es un proceso fácil y no es posible hacerlo en todos los casos. Por eso, es esencial que comprendas que, si no tienes cédula de habitabilidad y sufres daños importantes, como un incendio o daños por aguas, las compañías de seguros pueden no cubrirlos.

Recuerda que los seguros envían siempre a un perito para evaluar la situación y, si descubren que no tienes dicho documento, la cobertura puede ser escasa o nula. Por eso, es vital que te asegures de que tienes todos los requisitos necesarios para evitar problemas.

A veces, las compañías de seguros no te piden la cédula de habitabilidad, pero se aseguran de añadir una cláusula en el contrato que indica que están confiando en tu buena fe.

No obstante, si no tienes este documento o está caducado, lo mejor es que te ocupes de ello cuanto antes. Y si eres propietario o inquilino, asegúrate de que tu casa cumple con la ley para que sea seguro residir en ella. 

Una forma de sacar la cédula de habitabilidad es que un técnico municipal inspeccione tu vivienda. Pero no te preocupes, porque el proceso es sencillo y directo. Lo único que tienes que hacer es:

●     Acudir al ayuntamiento de tu localidad.

●     Rellenar un formulario de solicitud.

●     Tendrás que pagar una tasa.

●     Aporta algunos documentos, como tu DNI oficial, el contrato de alquiler o la escritura de propiedad, y un certificado de habitabilidad expedido por un arquitecto o aparejador.

●     Una vez que hayas completado estos pasos, un técnico acudirá a tu casa para realizar una inspección. Se comprobarán cosas como una ventilación correcta, una iluminación adecuada y unos sistemas eléctricos y de fontanería seguros.

●     Si todo cumple las normas exigidas, te entregarán la cédula de habitabilidad, que demuestra que tu casa es apta para vivir.

Una vez obtenida la cédula de habitabilidad, es recomendable contactar con un profesional experto en seguros, pues las pólizas para el hogar pueden variar mucho, y es importante que te asegures de tener una cobertura adecuada para los posibles riesgos o daños que puedan producirse.

Si tienes alguna duda, contacta con nuestros asesores para entender las condiciones del contrato, incluidas las exclusiones o limitaciones. Así estarás más tranquilo al saber que estás protegido en todas las circunstancias.