Uno de los mayores riesgos de las luces y de las decoraciones festivas son los cortocircuitos. Nuestro árbol de Navidad podría causar un incendio en casa si nos descuidamos, así que siempre se aconseja apagar todas las luces cuando no estemos en la misma habitación y comprar árboles de Navidad no combustibles.
Además, cuando compremos luces, iluminaciones y otros artículos navideños, sobre todo los eléctricos, tendremos que asegurarnos de que lleven la marca CE para cumplir las normas de seguridad europeas y se aconseja que sean tipo led.
Otro elemento al que prestar atención es mantener las luces alejadas de las fuentes de calor y de materiales fácilmente combustibles o inflamables, lo correcto será considerar una distancia de al menos un metro y medio de precaución. También es recomendable desenchufar las luces cuando estén apagadas y mantenerlas alejadas del agua.