¿Cómo gestionar el ahorro para niños?

Son un tipo de inversión a largo plazo con la que podrás construir un ahorro para tus hijos. Para lograrlo, contarás con la guía de un asesor financiero que te ayudará a mover tu capital en función de las fluctuaciones del mercado.

Una de sus principales ventajas es que puede iniciarse con 50 euros de inversión y puede retirarse a partir del segundo mes, lo cual te da liquidez en caso de que surja algún inconveniente con tu hijo y no tengas cómo hacerle frente.

Con los seguros de inversión o Unit Linked invertirás en fondos de inversión multiactivos, es decir que colocarás tu dinero en diferentes recipientes: en distintas empresas. Si uno de esos activos no funciona como esperábamos o sufre pérdidas, el resto de tu capital invertido en otras carteras se mantiene a salvo. Lo fundamental es diversificar la inversión para conseguir reducir el riesgo.

1. Las cuentas de ahorro. Evidentemente son una opción si quieres sacar el dinero de casa y ponerlo en un lugar seguro. El inconveniente principal de este tipo de productos financieros es que generan rendimientos prácticamente nulos. Actualmente en España, este tipo de instrumento está dando el 0% de interés.

2. Depósitos a plazo fijo. En este caso, el ahorrador puede saber cuánto va a ganar desde el primer momento, ya que previamente se pacta con la entidad financiera. Aunque el riesgo de perder nuestro dinero es prácticamente inexistente, una de sus desventajas es que no se puede acceder al dinero de manera inmediata o, bien, podrías ser penalizado por disposición anticipada del dinero. Es una opción que da tranquilidad a los ahorradores porque es fácil de entender.

3. Letras del tesoro y bonos. Es un tipo de activo bastante seguro que ofrece rentabilidades aceptables y comisiones muy similares a los depósitos a plazo fijo. Frente al riesgo y a la liquidez, es un tipo de ahorro para niños en los que es fácil desinvertir en caso de que así lo decida el adulto.

4. Ahorrar para niños a través de una renta fija privada. Aunque es una opción por la que algunas familias apuestan, es un instrumento de ahorro que plantea problemas de liquidez, tipos de interés y riesgo del emisor. Cuando ponemos todo nuestro capital en un solo título, nos arriesgamos a poner en peligro nuestro dinero ante cualquier deterioro del rating de la empresa elegida.

5. Compra de acciones. Invertir en bolsa es una buena alternativa para rentabilizar los ahorros a largo plazo siempre que no necesitemos disponer del dinero con prontitud. Si no tienes experiencia en ello, lo mejor es comenzar por el mercado nacional.

Como ves, existen diferentes opciones con las que podrás comenzar a construir un ahorro para tus hijos. El más conveniente para ti será aquel que se adapte a tus expectativas de futuro y, sobre todo, a lo importante que sea para ti generar unos rendimientos relevantes. Si necesitas asesoramiento, no dudes en contactar con nuestros expertos. Tenemos productos indicados para diferentes perfiles de ahorradores. 

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